Semana cinéfila

Sí señor, fin de exámenes. Finalmente libre, después de casi dos meses estudiando llega el tiempo de la calma, de la tranquilidad. De ahí la canción, "finally free", si bien el título le viene que ni pintado, el contenido de ésta no tiene nada que ver con lo que quiero expresar.

En fin, Serafín, durante estos últimos días me he tomado la libertad de tener la costumbre de ver un película por noche, y así he hecho. Algunas mejores, otras peores, pero he visto otro tipo de cine al que no estaba acostumbrado, pero oye, me ha gustado.

American Beauty (1999)

Venía recomendada por cierta persona, y la verdad no me defraudó para nada. Una película a la que me oponía totalmente verla en su día, no sé por qué, pero decidí dar un pasito adelante y no me equivoqué. Unas actuaciones muy conseguidas por parte del genial Kevin Spacey y de Wes Bentley, con una trama de altibajos rítmicos muy continuados y con la ruptura del ideal americano de la familia superfeliz hacen de esta tragicomedia una película MUY recomendable.

Valkyria (2008)

Otra película más sobre la Segunda Guerra Mundial, otra más, pero otra más que vuelvo a ver, no sé por qué. Quizás porque trata con un tema poco visto hasta ahora, como puede ser un plan de asesinato de Hitler, puede ser para comprobar si realmente Tom Cruise actúa bien aquí. Ambas cosas resultan ser ciertas. La historia se puede llegar a hacer un poco pesada cuando reinciden en los planes del atentado, vale que puedas llegar a saber el final una vez que las cosas desvarían un poco del principio (estoy intentando evitar los spoilers), pero se compensa con una buena historia y un final muy interesante, aún con la pega de lo antes dicho,

Báilame el agua (2000)

Me apetecía ver una españolada, y escogí esta con la que tenía una espinita clavada por no haberla visto entera hace ya unos años. La verdad es que perdí un poco el tiempo. Basada en la novela homónima de Daniel Valdés, nos cuenta cómo una pareja de jóvenes sin dinero se intentan ganar el pan de cada día en lo peor de la sociedad, como puede ser el mundo de la droga o la prostitución. Una historia muy típica de nuestro cine que se hace repetitiva según van avanzando los minutos y que tiene muy poco que ofrecer. Lo mejor, Pilar López de Ayala en uno de sus primeros papeles cinematográficos. Lo demás para olvidar.

Trainspotting (1996)

Ya para redondear una jornada de depresión social me atreví con esta, para comprobar si verdaderamente era tan buena como la pintan. Es entretenida, con geniales actuaciones (el papel de psicópata de Rober Carlyle es brutal), momentos muy atrevidos, igual que su historia, pero no me llenó completamente. Quizás su crudeza, que es lo que intenta reflejar, sea demasiada para mí, pero no deja de ser recomendable. Mención especial a un Ewan McGregor muy joven en su primer gran papel.

Wayne's World (1992)

El mundo de Wayne, el mundo de Wayne, marcha, marcha, es genial. Brutalmente cutre y mala la película, pero con un encanto especial que la hace única. Humor absurdo puro y duro, típico para adolescentes, pero resultones. Es lo único bueno que tiene porque la historia es bastante tonta y típica. Por lo visto cuenta con una secuela, de una calidad más que dudosa (más dudosa aún que esta). El momento Bohemian Rhapsody es sencillamente genial.

Los amantes del círculo Polar (1998)

Genial. Esa es la palabra que define a este film, que cuenta una historia de amor entre hermanastros de forma totalmente distinta a las demás, con un ritmo lento y pausado, pero llevado a cabo de forma muy seria, alternando la forma de contar la historia entre el chico y la chica. Es verdad que tiene algunas cosas incoherentes, como que dos niños no se hablen durante años si están uno al lado del otro y se ven diariamente, pero es perdonable. De lo mejorcito que he visto de cine español.


Después de una entrada bastante larga me despido hasta la próxima, espero que vuelva a ser videojueguil, pero ahora hay muchas cosas pendientes por hacer y poco tiempo disponible para hacerlo todo. Hasta la próxima.